El pasado 31 de mayo Huawei y Vodafone España hicieron público la iniciativa ‘Madrid Tech City’, un proyecto conjunto para posicionar Madrid como una de las ciudades más avanzadas, desde el punto de vista tecnológico, del mundo.
Madrid Tech City dotará a las áreas de Puerta del Sol, Plaza del Callao y Ópera de velocidades de red móvil 4G+ de 600Mbps. Además, con el objetivo de ampliar la cobertura del Parque de El Retiro y mejorar, por tanto, la experiencia de sus usuarios, se ha cubierto este espacio con una solución novedosa de antena activa. Asimismo, el 45% de las estaciones situadas dentro de la M-30 cuentan con velocidades de hasta 250 Mbps.
Tal y como comentamos en una entrada anterior, la estación de tren de Chamartín dispondrá de una solución diseñada para interiores, que mejorará la cobertura y capacidad y ofrecerá nuevos servicios basados en localización.
De esta manera se podrán ofrecer servicios como navegación y posicionamiento en interiores, publicidad adaptada al usuario y mapa de concentración de personas, combinando todo ello con el potencial de análisis de Big Data.
También en espacios de alta concentración de personas, concretamente en los estadios Santiago Bernabéu y Vicente Calderón, se integran nuevas tecnologías para mejorar la experiencia del usuario.
En el primero, se ha desplegado una red de acceso de radio basada en Cloud RAN, que permitirá a miles de aficionados disfrutar de altas velocidades y conexiones móviles 4G de alta calidad durante los eventos, evitando así las situaciones de congestión típicas de cualquier estadio.
Por otro lado, en el estadio Vicente Calderón se establecerá la tecnología 4×4 de múltiple entrada-múltiple salida avanzada (MIMO), con el fin de impulsar la capacidad de la red y maximizar los índices de descarga.
Por último, Vodafone España y Huawei han abierto la puerta del NB-IoT (Banda Estrecha de Internet de las Cosas). De esta manera, a través de la sensorización de dispositivos, se podrán ofrecer nuevos servicios al ciudadano, a las empresas y a las Administraciones públicas, como aparcamientos inteligentes, que cuentan con una mayor eficiencia en la gestión de plazas y permiten pagar antes de llegar, incluyendo la navegación hasta el lugar; una iluminación inteligente, que permite un ahorro energético; localización de objetos, niños o animales; recogida de basuras de manera más eficiente; sensores de polución; medidores de agua, gas y electricidad, etc.
La tecnología de NB-IoT permite una duración de baterías en sensores de hasta más de 10 años, conexiones masivas y reducción del precio de sus procesadores. Además, ofrece una mejor cobertura, llegando a lugares donde hasta ahora era imposible llegar a través de la red móvil, como zonas subterráneas.