General Electric ha hecho público este mes su adquisición definitiva de los negocios de energía y redes de Alstom. El cierre de dicha operación se produce tras la aprobación del acuerdo por parte de los reguladores de más de 20 países y regiones, incluyendo la Unión Europea, Estados Unidos, China, India, Japón y Brasil.
Se trata de la adquisición industrial más importante en la historia de General Electric, que alcanzó un acuerdo con Alstom en 2014 para la compra de sus negocios de energía y redes por importe de 12.350 millones de euros.
Así, ajustando la sociedad conjunta (joint venture) anunciada en junio de 2014, que desarrollará sus actividades en energías renovables, redes y energía nuclear, los cambios en la estructura de la transacción, los ajustes de precios para recursos y el efectivo neto al cierre, e incluyendo los efectos de la moneda, el precio de la compra ha sido de 9.700 millones de euros (aproximadamente unos 10.600 millones de dólares). Esto incluye un uso del capital circulante (working capital) de aproximadamente 600 millones en el mes de octubre.
General Electric espera que el acuerdo genere de 0,05 a 0,08 dólares de beneficio por acción en 2016 y de entre 0,15-0,20 dólares de beneficio por acción en 2018. Además, está estimando los 3.000 millones de dólares en sinergias en costes en el quinto año e importantes retornos de la transacción.
Los clientes percibirán inmediatamente los beneficios de la unión de General Electric y Alstom, incluyendo los proyectos actuales PSEG Sewaren (planta de ciclo combinado de Nueva Jersey), Punjab Pakistan Bhikki (planta de ciclo combinado de Pakistán), Exelon Power Plants (proyectos energéticos en Texas) y Chempark (proyecto de producción combinada de calor y energía en Leverkusen, Alemania).
Asimismo, General Electric anunció el pasado 2 de noviembre la formalización de la venta del negocio de señalización ferroviaria a Alstom por aproximadamente 825 millones de dólares.
En definitiva, General Electric continúa ejecutando su estrategia para convertirse en una empresa más sencilla y enfocada. Además de la compra de Alstom, ha comenzado la escisión de Synchrony Financial, donde la desinversión estratégica en GE Capital se está produciendo antes de lo planificado, con 126.000 millones de dólares de disposiciones firmadas.
Del mismo modo, la reciente creación de GE Digital está consolidando todas las capacidades digitales de la compañía para ofrecer a los clientes las mejores soluciones industriales y de software.